El temporal de lluvia y viento que azotó entre anoche y esta madrugada a Mar del Plata provocó serios daños materiales en el paseo marítimo, y la evacuación de por lo menos una veintena de personas.
Uno de los sectores más afectados, sobre todo por la pleamar de más de 3 metros que se produjo anoche, fue el paseo Dávila que une las playas La Perla y Punta Iglesias. Allí la furia del mar no sólo arrancó tramos enteros del paredón de piedra, sino que rompió grandes sectores de vereda, cuyos escombros quedaron regados sobre el pavimento.
Bancos de piedra de cerca de media tonelada fueron arrastrados varios metros por la fuerza de las olas, que arrancaron varios postes del alumbrado público del sector. Esta tarde, con un mar mucho más tranquilo e incluso algo de sol luego de tres jornadas de precipitaciones regulares y algo de agua-nieve, operarios municipales comenzaron a trabajar para recuperar ese paseo.
Mientras tanto, en el paseo costanero superior, ubicado una decena de metros sobre el Dávila, cientos de personas, entre ellas muchos turistas que pasan sus vacaciones en Mar del Plata, confluyeron esta tarde para ver personalmente los efectos del mar embravecido.
Funcionarios municipales indicaron que todavía no se evaluaron los costos económicos para reparar los daños, entre los que preocupa especialmente el socavado de la parte inferior del paseo Dávila que podría poner en riesgo el pavimento allí existente.
Ya ayer a la tarde, el secretario de Gobierno municipal, Ariel Ciano, advirtió sobre la crecida del mar que se esperaba para anoche y anunció que se cortaría el tránsito tanto en el Dávila como en el paseo Jesús de Galíndez, que une Cabo Corrientes y Playa Varese.
En este último sector, donde el mar está separado por la amplia playa Varese, del paredón y las veredas costaneras, se registraron daños en algunas construcciones ubicadas sobre la arena.
Otro lugar que sufrió el embate de las grandes olas fue el Club de Pescadores situado sobre el mar, en el extremo de la escollera de playa Bristol, en avenida Luro y la costa. Esa construcción, que se eleva unos 5 metros sobre el nivel habitual del mar, anoche fue castigada por olas que casi superaban la altura del edificio de dos pisos situado sobre el espigón, y que también dañaron instalaciones.
El presidente del Club, Rubén Greco, dijo que no se esperaba "un fenómeno semejante. Esto ha superado todas las expectativas, con olas que han superado los tres metros de altura". El temporal que se desató el martes pero que en el mar alcanzó su máxima intensidad entre anoche y esta madrugada, obligó a la evacuación de unas 20 personas, integrantes de cuatro familias cuyas viviendas resultaron dañadas.
Las olas que anoche tuvieron su máxima intensidad, también causaron daños en los complejos turístico-gastronómicos Playa Chica y Torreón del Monje, ubicados sobre distintos sectores de la costa marplatense que se hallan muy expuestos al mar.
Asimismo, distintos balnearios diseminados a todo lo largo de la costa marplatense sufrieron daños, como la voladura de pequeñas construcciones o kioscos de playa. "El mar ha movido piedras de las escolleras y se ha comido mucha arena", señaló el vicepresidente de la Cámara de Empresarios de Balnearios y Restaurantes, Jorge Riccillo.
Fuente: Clarin.com
